Ante este panorama, el presidente nacional del PP pidió apoyos ahora en las municipales para que los españoles apuesten por su partido, abriendo así el camino hacia el cambio en el Gobierno central. Y es que Rajoy no reparó en críticas hacia lo que durante estos años ha hecho el PSOE en materia de política económica. “Mientras el PSOE aumenta el paro, el PP hace que crezca el empleo”, enfatizó, recordando las cifras de empleabilidad existentes durante el mandato político de su partido.
Reconducir esa situación económica, reconoció, “no será fácil”, insistiendo en que la receta mágica pasa por poner en marcha un plan y disponer unas reglas de juego, unos criterios que no cambien. Dijo Rajoy que esto podía conseguirse con un “un plan a cuatro años vista con unas reglas de juego y unos criterios claros para generar seguridad y confianza”, poniendo además por delante un concepto, el de austeridad, “porque no se puede gastar lo que no se tiene como han hecho los socialistas”, dijo, añadiendo además la necesidad de todo Gobierno para apoyar a los emprendedores con vistas a salir adelante.
“Tenemos un problema, un drama humano, que son las cifras de desempleo, que casi cinco millones de personas quieren trabajar pero no pueden; y una prioridad absoluta, crear empleo”, avanzó. Esa es la máxima que trasladó Rajoy a los candidatos populares para que, conseguidas las respectivas alcaldías, intenten llevarla a cabo. “Todos los candidatos del PP que resulten elegidos el próximo 22 de mayo en ayuntamientos y autonomías tendrá como prioridad absoluta” la creación de empleo. “España necesita un cambio político porque para generar empleo hace falta inversión, confianza y crédito, y para conseguirlo es necesario un Gobierno serio y competente que sepa de lo que habla”, indicó, ironizando con lo que se necesita para votar al PSOE: “Hay que tener una generosidad sin límites que los líderes socialistas no se merecen”. Desde el fondo se escucharon otras necesidades distintas: “Hay que ser un cateto”, gritaba uno de los presentes.